jueves, 4 de julio de 2013

LA GUERRA DE LAS GALIAS: CÉSAR vs. VERCINGETORIX (documental completo)



Cayo Julio César (Latín: Gaius Iulius Caesar Roma, Italia, 13 de julio de 100 a. C. -- Ibídem, 15 de marzo de 44 a. C.) fue un líder militar y político de la era tardorrepublicana.
 
Nacido en el seno de la gens Iulia, en una familia patricia de escasa fortuna, estuvo emparentado con algunos de los hombres más influyentes de su época, como su tío Cayo Mario, quien influiría de manera determinante en su carrera política. En 84 a. C., a los 16 años, el popular Cinna lo nombró flamen dialis, cargo religioso del que fue relevado por Sila, con el cual tuvo conflictos a causa de su matrimonio con la hija de Cinna. Tras escapar de morir a manos de los sicarios del dictador, fue perdonado gracias a la intercesión de los parientes de su madre. Trasladado a Asia, combatió en la Tercera Guerra Mitridática como legatus de Marco Minucio Termo. Volvió a Roma a la muerte de Sila en 78 a. C., ejerciendo por un tiempo la abogacía. En 73 a. C. sucedió a su tío Cayo Aurelio Cotta como pontífice, y pronto entró en relación con los cónsules Pompeyo y Craso, cuya amicitia le permitiría lanzar su propia carrera política. En 70 a. C. César sirvió como cuestor en la provincia de Hispania y como edil curul en Roma. Durante el desempeño de esa magistratura ofreció unos espectáculos que fueron recordados durante mucho tiempo por el pueblo.
 
En 63 a. C. fue elegido praetor urbanus al obtener más votos que el resto de candidatos a la pretura. Ese mismo año murió Quinto Cecilio Metelo Pío, Pontifex Maximus designado durante la dictadura de Sila, y, en las elecciones celebradas con objeto de sustituirle, venció César. Al término de su pretura sirvió como propretor en Hispania, donde lideró una breve campaña contra los lusitanos. En 59 a. C. fue elegido cónsul gracias al apoyo de sus dos aliados políticos, Pompeyo y Craso, los hombres con los que César formó el llamado Primer Triunvirato. Su colega durante el consulado, Bíbulo, se retiró a fin de entorpecer la labor de César que, sin embargo, logró sacar adelante una serie de medidas legales, entre las que destaca una ley agraria que regulaba el reparto de tierras entre los soldados veteranos.
 
Tras su consulado fue designado procónsul de las provincias de Galia Transalpina, Iliria y Galia Cisalpina; esta última tras la muerte de su gobernador, Céler. Su gobierno estuvo caracterizado por una política muy agresiva en la que sometió a la práctica totalidad de pueblos celtas en varias campañas. Este conflicto, conocido como la Guerra de las Galias, finalizó cuando el general republicano venció en la Batalla de Alesia a los últimos focos de oposición, liderados por un jefe arverno llamado Vercingétorix. Sus conquistas extendieron el dominio romano sobre los territorios que hoy integran Francia, Bélgica, Holanda y parte de Alemania. Fue el primer general romano en penetrar en los inexplorados territorios de Britania y Germania.
 
A pesar de que bajo su gobierno la República experimentó un breve periodo de gran prosperidad, algunos senadores vieron a César como un tirano que ambicionaba restaurar la monarquía. Con el objeto de eliminar la amenaza que suponía el dictador, un grupo de senadores formado por algunos de sus hombres de confianza como Bruto y Casio y antiguos lugartenientes como Trebonio y Décimo Bruto, urdieron una conspiración con el fin de eliminarlo. Dicho complot culminó cuando, en las idus de marzo, los conspiradores asesinaron a César en el Senado. Su muerte provocó el estallido de otra guerra civil, en la que los partidarios del régimen de César; Antonio, Octavio y Lépido, derrotaron en la doble Batalla de Filipos a sus asesinos, liderados por Bruto y Casio. Al término del conflicto, Octavio, Antonio y Lépido formaron el Segundo Triunvirato y se repartieron los territorios de la República, aunque, una vez apartado Lépido, finalmente volverían a enfrentarse en Actium, donde Octavio, heredero de César, venció a Marco Antonio.
 
Al margen de su carrera política y militar, César destacó como orador y escritor. Redactó, al menos, un tratado acerca de astronomía, otro acerca de la religión republicana romana, y un estudio sobre el latín, ninguno de los cuales ha sobrevivido hasta nuestros días. Las únicas obras que se conservan son sus Comentarios de la Guerra de las Galias y sus Comentarios de la Guerra Civil. Se conoce el desarrollo de su carrera como militar y gran parte de su vida a través de sus propias obras y de los escritos de autores como Suetonio, Plutarco, Veleyo Patérculo o Eutropio